Ciertas facetas de la naturaleza humana han estado tradicionalmente ausentes en el entorno laboral: el juego, el humor y la música son buenos ejemplos. Hoy entendemos que no hay motivo para ello y que, de hecho, la música en el trabajo, genera bienestar laboral.
Enseguida exploramos brevemente por qué la música en el trabajo nos hace felices, cómo impacta positivamente el ámbito laboral y qué acciones pueden implementar las organizaciones para aprovechar esta sinergia entre música y felicidad.
¿Por qué la música en el trabajo nos hace felices?
Sabemos que la música influye positivamente en el estado de ánimo. Pero, ¿por qué sucede esto?
- La música estimula el sistema límbico, el cual está ligado a las emociones, la memoria, la motivación y el aprendizaje, entre otros aspectos fundamentales.
- En términos hormonales, la música puede elevar los niveles de dopamina (que activa el sistema de recompensa) y reducir el cortisol (que provoca el estrés), especialmente si es una melodía armónica y familiar.
- El contexto es tan importante como la música en sí. Según el marco BRECVEMA de P. Juslin, la dinámica de la experiencia musical incluye factores personales y colectivos.
- Las características de la «música alegre» son una escala mayor, un acorde dominante de séptima, un ritmo animado, y una letra que inspire o divierta, generando una secuencia sonora que «encaja».
Así, el impacto de la música en eltrabajo no es automático. Depende de cómo se adapte a las personas y circunstancias. La buena noticia es que solemos saber, intuitivamente, qué música se ajusta mejor.
Los beneficios: rendimiento, conexión y satisfacción
Diversos estudios (en su mayoría encuestas) sugieren que la música mejora el rendimiento en la mayoría de las personas, especialmente en términos de concentración, creatividad y habilidades cognitivas.
Además, la música puede fortalecer la cohesión interpersonal y el alineamiento con la cultura organizacional. No se trata de escuchar la misma música en modo “uniforme”, sino de alinear actitudes y estados de ánimo para reforzar la práctica laboral mediante un elemento compartido: la música.
Finalmente, uno de los efectos más duraderos y significativos es la satisfacción que produce escuchar música, lo cual activa el ciclo virtuoso de la felicidad. La canción adecuada en el momento oportuno puede ser un potente activador de bienestar.
Ideas para usar la música y potenciar la felicidad en el trabajo
Veamos algunos ejemplos prácticos de cómo integrar la música en el entorno laboral:
- Listas de reproducción compartidas: Cada miembro del equipo puede proponer una canción y, para facilitarlo, el líder puede sugerir un tema semanal. Esto no solo personaliza el ambiente, sino que fomenta el conocimiento y la simpatía mutua.
- Eventos musicales fuera del trabajo: Asistir juntos a un concierto puede ser una actividad sencilla y accesible. No hace falta un gran espectáculo; un evento musical ameno y breve puede ser suficiente.
- Días temáticos de música: Si el equipo lo disfruta, un día musical puede convertirse en una tradición divertida y motivadora. Algunas ideas:
- Pequeño festival interno: No hace falta Woodstock; un par de músicos locales pueden crear un ambiente excelente.
- Actuaciones internas: Si alguien en el equipo toca un instrumento o canta, ¡anímalo a compartir su talento!
- Talleres musicales: Aprender música de manera lúdica y práctica es una excelente herramienta para cohesionar al equipo.
Implementar estas acciones puede ayudar a que la música y el bienestar laboral se conviertan en aliados, impulsando un ambiente de trabajo más ameno y productivo.
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